En un entorno empresarial competitivo y desafiante, la clave del éxito radica en fomentar una cultura que priorice el bienestar de los empleados. Crear un ambiente de trabajo positivo no solo impulsa la satisfacción y la lealtad de los equipos, sino que también se refleja en un aumento de la productividad y un compromiso más fuerte con los objetivos de la empresa.
La décima edición del Premio ABE reconoce a las empresas que lideran con innovación y compromiso, destacando historias que reflejan las mejores prácticas del mercado peruano. Estas narrativas muestran cómo han enfrentado los retos de un entorno digital, priorizando a las personas y contribuyendo a un modelo empresarial más humano y resiliente. Este premio se ha consolidado como un referente en el ámbito empresarial, fomentando un ambiente de trabajo más saludable y resaltando la importancia de cuidar a los empleados para asegurar el éxito de las empresas.
Es en este contexto que EY y la Asociación de Buenos Empleadores (ABE) preparan la sexta edición de la publicación que recopila las historias que sirven como una plataforma para compartir buenas prácticas en gestión humana, inspirando a los líderes e impulsando la construcción de rutas de cambio de los procesos internos. Estas historias no solo son referentes, sino que también ofrecen ejemplos concretos sobre cómo implementar buenas prácticas en gestión humana en un entorno de transformación. Desde programas de liderazgo y desarrollo profesional hasta iniciativas de inclusión y diversidad, los casos presentados en esta edición demuestran que es posible crear un ambiente de trabajo positivo y productivo.
En esta edición, hemos identificado tendencias emergentes en la gestión del talento y la dinámica de la fuerza laboral que queremos destacar. Estas tendencias fueron evaluadas durante la revisión de las iniciativas premiadas este año, así como en sesiones con líderes de gestión humana de las organizaciones galardonadas y en conversaciones con los gerentes generales de las empresas ganadoras.
Tendencias emergentes
- Evolución y flexibilidad
- Colaborador en el centro
- Desarrollo integral
- Desempeño alineado al propósito y los objetivos
- Reconocimiento y recompensas integrales
- La cultura como factor preponderante
- Transformación y empoderamiento
- Tecnología como habilitador
- Sostenibilidad en el desarrollo
En conclusión, potenciar a las personas a través de estrategias transformadoras implica abordar los cambios con eficiencia, agilidad e innovación, promoviendo el crecimiento, modelando la cultura, desarrollando el liderazgo y mejorando la experiencia del colaborador en un entorno laboral flexible, diverso e inclusivo.
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